Kevin Dick, oficial de salud del distrito del condado de Washoe (WCHD en inglés), no se anduvo con rodeos este miércoles. Dijo que los no vacunados son responsables del aumento de los casos de COVID-19, y que el último mandato de máscara del gobernador Steve Sisolak es necesario debido a la cantidad de personas que eligen no vacunarse.
“También quiero enfatizar que [los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC)] han demostrado que siguen la ciencia al tomar sus decisiones”, dijo. “Nuestro camino a seguir es que las personas se vacunen. Tenemos una vacuna muy segura y eficaz, y está fácilmente disponible”.
Dick también dijo que estaba frustrado por quienes se negaban a recibir la vacuna. El condado de Washoe está vacunado en un 50% aproximadamente. Recientemente, el condado superó una tasa de positividad de la prueba del 8%, y el medidor de riesgo COVID de la región está nuevamente en el rango “alto”.
“Nuestra transmisión de COVID-19 es impulsada por nuestra población no vacunada”, dijo Dick. “Hemos escuchado a mucha gente hablar acerca de si vacunarse o no es una elección personal, y [que] debería depender de cada individuo tomar esa decisión, porque solo los afecta a ellos. Eso es falso.”
El problema con los no vacunados es que transmiten COVID-19 a los vacunados, agregó Dick. “Afecta el riesgo de que todo el mundo se infecte con COVID-19. Sabemos que tenemos casos revolucionarios que ocurren entre personas vacunadas, porque tenemos muchas personas no vacunadas en nuestra comunidad… “
Aumento de casos Delta
Los casos de COVID-19 de la variante Delta continúan aumentando.
“Estamos informando un total de 301 casos que han sido secuenciados genéticamente e identificados como la variante Delta”, dijo el oficial de información pública de WCHD, Scott Oxarart.
Desde el 1 de julio, se han reportado cuatro muertes relacionadas con la variante Delta de COVID-19 en el condado de Washoe. Las cuatro personas no estaban vacunadas.
Hay más de 300 casos de la variante Delta en el condado de Washoe, y más de 25 personas han sido hospitalizadas por esa variante: 22 de ellas no estaban vacunadas y siete fueron ingresadas a la Unidad de Cuidados Intensivos.
Aquellos que reciben la vacuna COVID-19 tienen menos probabilidades de contraer la variante Delta, ser hospitalizados o morir de COVID-19, dijo Oxarart.
“Si queremos seguir avanzando, si queremos que nuestra economía prospere y que nuestras vidas vuelvan a la normalidad, la solución es aprovechar las increíbles vacunas que se han desarrollado y que están disponibles para protegernos a nosotros mismos y entre unos y otros en nuestras comunidades”, dijo Dick.
